(Leído en la revista
Mujer de Hoy del 10 de enero de 2009)
El Kamut resulta algo gomoso, pero mejora si lo combinamos con otros cereales
(espelta, avena, centeno...) o se prepara en sopas y guisos. La harina de kamut
se emplea para hacer panes, bollos y galletas, pero también se consume en
copos. Necesita 90 minutos para su cocción.
Denominado trigo de los faraones, dicen que fue rescatado del olvido
milenario por alguien que lo encontró en un sarcófago egipcio. Cultivado en Mesopotamia
hace 4.000 años, es un 20% más grueso que el grano del trigo común y tiene un 14%
más de proteínas, un 65% más de aminoácidos, más grasas saludables, mucho
selenio y vitamina E. Está recomendado como sustituto para los alérgicos al
trigo.
Quinoa. Aunque lo parece, no es realmente un cereal y pertenece a la familia
de las espinacas. Su sabor es parecido al del arroz integral. Contiene menos
hidratos de carbono, pero el doble de proteínas que el trigo, varias vitaminas
del grupo B y fibra e incluso una dosis notable de grasas cardiosaludables. Además,
es una autentica mina de sales minerales. No tiene gluten, así que pueden
consumirla sin riesgo los celíacos.
La quinoa cruda se parece un poco al cuscús. Tiene un anillo en torno a cada grano, que contiene la mayoría de las proteínas y le da una textura crujiente. Facilísima de preparar, requiere en cambio un buen lavado previo para eliminar su amargor. Sólo precisa 15 minutos de cocción.
La quinoa cruda se parece un poco al cuscús. Tiene un anillo en torno a cada grano, que contiene la mayoría de las proteínas y le da una textura crujiente. Facilísima de preparar, requiere en cambio un buen lavado previo para eliminar su amargor. Sólo precisa 15 minutos de cocción.
La espelta es la madre de todos los trigos. Tiene más proteínas, minerales,
vitaminas y oligoelementos que el trigo común además de una considerable
cantidad de fibra. La demanda de espelta se disparó cuando se observó
que muchos pacientes mejoraban de lo que se conoce como "subalergias"
(síntomas sin explicación aparente, como cefaleas, edema, cansancio...) cuando dejaban
de tomar trigo común y la consumían.
El mijo, de aspecto parecido a cuscús, es riquísimo en fósforo y vitaminas
del grupo B y contiene el valioso lisina, un aminoácido esencial para los seres
humanos. Los expertos han redescubierto ahora sus beneficios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario